martes, 23 de agosto de 2011

Noche de Lobos

Gota tras gota cae la lluvia. Fría lluvia de Invierno que moja, enfría y lastima. Por la ventana, veo como esas gotas se agigantan al caer en la calle de esta Ciudad...
Pienso. Medito. La Lluvia me pone nostálgico. Me obliga a ser Reflexivo. No tolero más verla Caer. Voy a su encuentro, casi sin mas abrigo que la necesidad de encontrar un camino en medio de una Niebla enceguecedora.
"¡Ey Loco! ¿Dónde vas? ¿Acaso no ves el diluvio que cae fuera?". Sí, mi buen perro... sí lo veo. Tranquilo, seguí durmiendo que no te voy a sacar a pasear. Este es un paseo para Lobos, no para perros.
Los Lobos salimos a aullarle a la Luna, y mojarnos en el velo de su llanto. Aullamos pidiéndole a Nuestra Patrona, y nos mojamos en su llanto, para recibir su Bendición. Espero que nuestra Diosa Luna me escuche hoy, que necesito de su Guía en este camino incierto, empapado por la cortina de agua que no deja de caer, golpeando mi rostro peor que un campeón de peso completo...
La Sensualidad del baile de cada gota coquetenado con su primo el granizo, me estimula el pensamiento. Me obliga, casi como un afrodisíaco para la Inspiración, a escribirle a la Luna y a su Velo de Dolor, a cantarle al pequeño lago urbano que se generó con la incesante caida en la esquina de mi hogar, a sacar a relucir mi Enmohecido Artista, del armario tan húmedo como lo esta mi Ciudad.
Gracias Patrona por demostrarme el camino de tu Inspiración...

No hay comentarios: